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lunes, 2 de mayo de 2011

Inseminación artificial


La inseminación artificial es un método de reproducción en donde la esperma es ubicada – mediante instrumentos especializados  – en el óvulo, cérvix, útero o en las Trompas de Falopio de la mujer. Este método es utilizado por diversas razones y hay diferentes tipos. A lo largo del texto estos temas se irán abordando.

En la inseminación artificial se extrae semen, el cual es “lavado” para luego ser introducido en la mujer. Los motivos para llegar a utilizar este controversial método puede ser que:

- El moco cervical (sustancia producida por cuello uterino parecida a un moco) de la mujer sea hostil a los espermios.

     - El hombre tenga anticuerpos (moléculas de inmunidad humoral, cuya función es la defensa contra los microorganismos extracelulares) contra su semen.

     - El hombre no pueda eyacular dentro de la vagina
     -  El hombre padezca de eyaculación retrograda (el semen es eyaculado dentro de la vejiga y no fuera del pene)
     - El hombre sufra de oligospermia (baja cantidad de espermatozoides), astenospermia (número de espermatozoides móviles con desplazamiento es inferior al 50%, esto constituye un problema de fertilidad), teratospermia (abundancia de espermatozoides anormales) o azoospermia (ausencia de espermatozoides).
En  la inseminación artificial no hay un único procedimiento, hay diferentes tipos. Puede que es semen sea de un donante conocido o de un donante anónimo. Para el primer caso, el semen debe estar fresco, luego es lavado y unos minutos después se realiza la inseminación artificial. Para el segundo caso, el semen esta criopreservado (material lavado y congelado).
En ambos casos, el semen es introducido en la mujer cuando el óvulo es liberado.
La inyección del semen puede hacerse en diferentes lugares. Existe la inseminación artificial intrauterina, intravaginal e intracervical.
En el primer caso, en la vagina de la mujer se inserta un especulo (instrumento para examinar cavidades corporales) con una jeringa que contiene los espermios – que fueron separados del liquido seminal mediante un sistema de gradiente –. Esto se inserta en el cérvix (cuello uterino) para depositarlo en el útero.



En el segundo caso, se debe colocar una muestra de semen dentro de una jeringa estéril. La jeringa es instalada dentro de la vagina y se ejerce una ligera presión para que la jeringa llegue hasta el cuello uterino. Cuando se encuentre en el lugar indicado, se deposita el semen.


En el tercer punto, los espermatozoides de un donante son ubicados directamente en el cuello del útero, con esto aumentan las posibilidades de que los espermatozoides “se abran camino por el útero y las Trompas de Falopio, donde pueden fertilizar en óvulo”.



La inseminación artificial posee mínimas complicaciones, éstas pueden ser: dolor cólico, nauseas y vómitos y sangrado escaso pocas horas después de la inseminación.
Para llevar a cabo este método de reproducción, las trompas de uterinas deben encontrarse permeables y en buen estado.
Aunque este método es popular, no está fuera de polémicas por las posibles utilizaciones de los espermios y óvulos. Con la inseminación artificial surge la duda si es un procedimiento ético o no.

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